Emily Ceco amplió su denuncia contra Santiago Martínez, su expareja y exconcursante del reality Love is Blind Argentina, en el marco de la causa por violencia de género que lleva adelante la fiscal de Morón, María Laura Cristini. Durante una entrevista en Intrusos, Ceco brindó nuevos detalles sobre los episodios de violencia y expresó: “Realmente es peligroso”.
Martínez, de 30 años, fue detenido en la previa del Paro Internacional de Mujeres del 8 de marzo, acusado de “homicidio agravado en grado de tentativa en contexto de violencia de género, lesiones leves agravadas y privación ilegítima de la libertad”. Según su abogado, Roberto Castillo, enfrenta una posible condena de al menos 15 años de prisión.
Los hechos denunciados por Ceco ocurrieron el 8 de febrero, cuando regresó a su casa en Ituzaingó tras su despedida de soltera. La joven relató que su entonces pareja reaccionó con agresiones verbales y físicas, a pesar de haber mostrado apoyo previamente. Semanas después, en una entrevista con el programa El ejército de la mañana, se quitó los lentes de sol y mostró las lesiones sufridas.
Castillo, quien tomó el caso por recomendación de Cinthia Fernández, confirmó que presentaron “80 páginas de evidencia y una declaración de 25 páginas donde Emily detalla todos los hechos de violencia que sufrió”. Además, un excompañero del reality testificó en la causa, asegurando que presenció una situación de agresión fuera de la grabación.
A raíz de la denuncia, otras mujeres que tuvieron una relación con Martínez se contactaron con Ceco para contarle que también habían vivido episodios de violencia con él. “Nunca con la magnitud que fue conmigo”, aseguró la denunciante.
En otro tramo de la entrevista, Ceco reveló una conversación con la madre de Martínez, quien intentó minimizar los hechos calificándolos de “aislados”. “Incluso me propuso una reunión familiar para resolverlo”, contó. Según su testimonio, su respuesta fue contundente: “Si esto le hubiera pasado a tu hija, ¿le dirías que se reúna con la familia del agresor para solucionarlo?”.
La causa fue derivada a la UFI 10 de General Rodríguez, especializada en Violencia Familiar y de Género, y posteriormente trasladada a Morón, donde continúa la investigación.