Mientras el gobernador Gustavo Melella festejaba en el búnker del Centro San Martín de Río Grande el 54 por ciento de los votos que le permitió la reelección, sus colaboradores y los principales referentes de la oposición se mostraban sorprendidos y preocupados por los inéditos porcentajes de voto en blanco, que increíblemente ocupaba el segundo lugar, por encima de todos los candidatos de la oposición.
De acuerdo con el Juzgado Electoral de esta provincia, 14.053 personas (20,97%) no pusieron ninguna boleta en el sobre que luego depositaron en la urna. Se trata de algo menos de la mitad de los 35.493 sufragios que eligieron la lista del oficialismo, Forja.
“Es una locura el porcentaje de voto en blanco que hay, no hay antecedentes como esto, aunque siempre es muy alto. El motivo principal es que acá es muy difícil votar, la gente no entiende el sistema”, dijo el referente de la oposición Paulino Rossi.
El empresario fueguino, sin embargo, admitió que parte de la responsabilidad es por la falencia de las fuerzas opositoras para canalizar el voto bronca. “Esto no es sólo una cuestión aritmética. No hay dudas de que si hubiéramos ido unidos seguramente hubiéramos capitalizado un porcentaje mucho mayor de la sociedad que está disconforme con Melella, pero que también está descontenta con la oposición. Nosotros estamos en un proceso de mostrar que no somos sus cómplices de Melella, y con esta elección quedó clarísimo que Pablo Blanco jugó a su favor. Su candidatura era una gran farsa que hoy se terminó”, dijo.
Sin alusiones a este fenómeno, los dirigentes nacionales se lanzaron a abrazar a Melella sin distinciones. Con un mensaje en Twitter, el ministro de Economía, Sergio Massa, felicitó al gobernador por la reelección. “Felicitaciones Gustavo Melella. El esfuerzo de pensar en la industria, de avanzar con el proyecto Fénix en el desarrollo de gas con valor agregado y de trabajar siempre pensando en tu gente, tiene premio. TE ABRAZO”, dice el tuit del dirigente oficialista.