El Tesoro de los Estados Unidos volvió a operar este martes en el mercado argentino con la compra de pesos, en una maniobra destinada a contener la volatilidad cambiaria en la antesala de las elecciones presidenciales.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, confirmó la intervención y detalló que se trata de una operación de compra directa de pesos en el mercado abierto, con el objetivo de “aportar estabilidad” al sistema financiero argentino.
Durante una rueda de prensa en Washington, Bessent señaló que el paquete de asistencia total para la Argentina alcanzaría los 40.000 millones de dólares, respaldados en parte por Derechos Especiales de Giro (DEG). Según explicó, el plan incluiría una línea de 20.000 millones de dólares sumada a un swap con bancos privados y fondos soberanos, orientado principalmente al mercado de deuda.
“Estamos trabajando en una facilidad de 20.000 millones junto a nuestra línea de swap, con bancos privados y fondos soberanos que apuntarían más al mercado de deuda. Eso totalizaría 40.000 millones para la Argentina”, precisó el funcionario.
Bessent también destacó que los Estados Unidos mantendrán su respaldo financiero mientras el país “desarrolle buenas políticas” y sostuvo que un triunfo electoral de La Libertad Avanza “fortalecería la capacidad del gobierno argentino de vetar malas políticas”.
Ante una consulta sobre la posibilidad de que el Tesoro norteamericano compre deuda argentina, Bessent respondió que “podrían hacerlo”, aunque evitó ofrecer mayores detalles sobre los mecanismos y plazos de esa potencial operación.