El pasado jueves, la Cámara de Diputados otorgó la media sanción a la Ley de Bases y al paquete fiscal, enviándolos al Senado de la Nación para su consideración. En un entorno político tenso, el oficialismo senatorial, liderado por la vicepresidenta Victoria Villarruel, se prepara para consolidar apoyos y avanzar con las legislaciones.
Con solo 33 bancas kirchneristas sobre un total de 72 en el Senado, el oficialismo se encuentra en minoría numérica, lo que exige habilidades políticas para forjar consensos. Este desafío incluye la coordinación con los bloques federales, que representan a los gobernadores provinciales.
La discusión de la ley en comisiones está programada para comenzar el próximo martes, con la participación de las comisiones de Legislación General, Asuntos Constitucionales, y Presupuesto y Hacienda. Sin embargo, el calendario ajustado por el Pacto de Mayo, programado para el 25 de este mes en Córdoba, ejerce presión sobre el oficialismo para actuar con celeridad.
Si se logra el dictamen el jueves 9 de mayo, las iniciativas podrían llegar al hemiciclo senatorial el jueves 16, a nueve días del evento en Córdoba. De lo contrario, la alternativa sería el jueves 23, apenas horas antes del encuentro con los gobernadores.
Para coordinar la estrategia, se ha previsto una reunión de presidentes de bloque por Zoom el lunes, seguida de una reunión plenaria de las comisiones involucradas el martes, con la participación de funcionarios clave. El miércoles se darán continuidad a las discusiones con exposiciones de otros funcionarios, y el jueves se cerrará con otra reunión plenaria de todas las comisiones implicadas.
