Tras la controversia generada por la maniobra realizada por el piloto del nuevo avión presidencial ARG 01, valuado en 25 millones de dólares, surgieron críticas y comunicados por parte de la fuerza aérea. El propio piloto, Leonardo Barone, decidió abordar el tema en una entrevista con un reconocido medio.
Durante la entrevista, Barone afirmó enfáticamente: “Todo se hizo con autorización. No hago nada sin ella. La pasada fue absolutamente legal. Hay videos y está todo documentado”. Además, explicó que consideraron que esa era la forma adecuada de dar la bienvenida.
El piloto justificó su acción argumentando que estaban solos y vacíos en una pista, sin llevar a cabo ninguna actividad fuera de allí. Señaló que la repercusión negativa desinformó a la gente, pero en términos de aviación, todo se llevó a cabo dentro de los límites permitidos, sin incidentes ni irregularidades. Destacó que el perfil de vuelo, así como la autorización, son públicos y verificables, cuestionando la existencia de algún delito.
Barone dejó claro que la polémica generada no está relacionada con asuntos aeronáuticos, sino que se vincula más con aspectos mediáticos y políticos.
Por último, como titular de la Dirección General de Logística de la Subsecretaría de Planificación y Servicio, Barone elogió la gestión del Gobierno nacional y criticó la administración previa de Mauricio Macri en términos de mantenimiento e inversión en la flota presidencial. Hizo hincapié en que, al asumir su cargo, la mayoría de los helicópteros y aviones estaban fuera de servicio, y solo uno de los tres helicópteros estaba en funcionamiento.