El escrito oficial firmado por la ministra Patricia Bullrich, indica que el proyecto tiene como objetivos específicos “desarticular redes delictivas y estructuras criminales que promueven la violencia letal en los territorios seleccionados”.
El Gobierno Nacional aprobó, a través de la Resolución 448/2025 publicado en el Boletín Oficial, el Plan 90/10 con la idea de bajar los homicidios en el país. Este programa explica que el 90% de los homicidios intencionales ocurren en el 10% de los municipios del país.
El escrito oficial firmado por la ministra Patricia Bullrich, indica que el Plan 90/10 tiene como objetivos específicos “desarticular redes delictivas y estructuras criminales que promueven la violencia letal en los territorios seleccionados; recuperar el control territorial en zonas de alta conflictividad donde el Estado ha perdido presencia frente a actores violentos; fortalecer las capacidades de las Fuerzas Policiales y de Seguridad Federales y el sistema de justicia para mejorar la tasa de esclarecimiento y sanción de los homicidios intencionales”.
Además, propicia “disminuir la circulación y uso ilegal de armas de fuego; reducir los factores de riesgo que generan violencia letal, desarrollar políticas de prevención y aumentar los niveles de confianza y cooperación entre la comunidad y las Fuerzas Policiales y de Seguridad Federales”.
Se detalló que las primeras jurisdicciones que tendrán partida con este plan son Rosario, Santa Fe y San Miguel de Tucumán; los partidos bonaerenses de Esteban Echeverría y General Pueyrredón; sumado a los departamentos de Godoy Cruz y Las Heras en la provincia de Mendoza, además de la ciudad de Córdoba.
En la Resolución, el Gobierno Nacional remarcó que, aunque en términos generales, “la tasa de homicidios en Argentina se mantiene en niveles relativamente moderados comparada con otros países de la región”, todavía “persisten focos críticos en ciertas áreas urbanas y territorios con alta vulnerabilidad social”.
En este marco, describen que “el fenómeno de los homicidios presenta una distribución geográfica desigual, con tasas más altas, donde la combinación de factores como la narcocriminalidad y la marginalidad social favorecen el control territorial por parte de los grupos criminales”.
“Los homicidios suelen estar asociados a otras formas de violencia, como la violencia intrafamiliar y/o la violencia juvenil. Esta violencia, a su vez, retroalimentan un ciclo que aumenta la probabilidad de incidentes letales, por lo que es fundamental abordar estas dinámicas para tener un impacto sostenible en la reducción de homicidios”, destacaron.
Fuente: Filo