El Gobierno nacional presentó la recusación contra el juez federal Ernesto Kreplak, a cargo de la investigación por el fentanilo contaminado que provocó la muerte de al menos 96 personas tras la aplicación de anestésicos en distintos hospitales públicos del país. La medida se conoció pocas horas después de que la Cámara de Diputados solicitara explicaciones oficiales sobre el avance del caso.
Fuentes de la Casa Rosada señalaron que el magistrado mantiene un vínculo familiar con el ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, lo que podría comprometer su imparcialidad. La provincia de Buenos Aires es uno de los distritos en los que se distribuyeron ampollas provenientes de los laboratorios HLB Pharma y Ramallo con el fármaco contaminado.
Desde el Gobierno también remarcaron que, pese a los avances en la investigación, el juez aún no procesó a ninguno de los sospechosos, entre ellos Ariel García Furfaro, titular de HLB Pharma. En declaraciones a distintos medios, Furfaro se desligó de la contaminación y apuntó contra un ex socio, Andrés Quinteros: “Si las ampollas están contaminadas, alguien lo hizo”. Además, aseguró que “el opioide no tiene nada que ver con las muertes” y que “si realmente las ampollas tienen esa contaminación, alguien la puso”.
La investigación se centra en la producción y distribución de anestésicos contaminados con bacterias multirresistentes. Según datos oficiales, se repartieron más de 300.000 ampollas a hospitales y clínicas de distintas provincias, de las cuales al menos 45.000 fueron aplicadas antes de su retiro.
Si bien se realizaron allanamientos, secuestros de insumos, embargos y prohibiciones de salida del país para 24 sospechosos, Kreplak explicó en diálogo con Infobae que todavía no dictó procesamientos porque espera “reunir todas las pruebas para poder avanzar”.