El empleo asalariado formal en Argentina cayó por décimo mes consecutivo en julio, según el informe del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) publicado el jueves.
Durante ese mes, se contabilizaron 10.200 empleos menos entre los asalariados del sector privado, sector público y trabajadoras de casas particulares. El mayor retroceso se dio en el sector privado, con la pérdida de 8.900 puestos de trabajo, lo que representó el principal factor de deterioro en el mercado laboral. En el sector público, la baja fue de 1.400 empleos, mientras que en el segmento de casas particulares se registró un incremento de 1.000 trabajadoras.
Desde noviembre de 2023, antes del cambio de gobierno, se han perdido 196.400 empleos, de los cuales 146.500 corresponden al sector privado, 41.300 al público y 8.700 a trabajadoras de casas particulares.
En cuanto a agosto, la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) mostró una leve caída, aunque aún es insuficiente para proyectar con certeza los datos del SIPA.