El fiscal del condado de Utah, Jeff Gray, confirmó este martes que Tyler Robinson, el joven de 22 años detenido por el crimen del activista conservador Charlie Kirk, fue acusado de homicidio agravado y otros cargos que podrían derivar en la aplicación de la pena capital.
Kirk, de 31 años, fundador de Turning Point USA y referente del conservadurismo en Estados Unidos, fue asesinado el pasado 10 de septiembre durante un acto en la Universidad del Valle de Utah (UVU). Recibió un disparo en el cuello cuando se encontraba en el campus, en el marco de una gira universitaria.
Cargos agravados y nuevas imputaciones
Gray explicó que Robinson fue imputado por asesinato con agravantes “por causar intencional o conscientemente la muerte de Charlie Kirk en circunstancias que generaron un gran riesgo de muerte para terceros”. Además, la Fiscalía alegó factores adicionales: el ataque habría estado motivado por la ideología política de la víctima y se realizó en presencia de menores.
A Robinson también se le atribuyen otros delitos, entre ellos disparar un arma causando lesiones corporales graves, obstrucción a la justicia por ocultar el rifle y deshacerse de la ropa usada en el ataque, y manipulación de testigos al ordenar a su compañero de vivienda borrar mensajes incriminatorios y guardar silencio ante la policía.
La investigación reveló que el arma utilizada fue un rifle que, según reconoció su padre, coincidía con el que él mismo le había regalado. El acusado permanece detenido sin derecho a fianza y, según las autoridades, se ha negado a cooperar con los investigadores.
Un caso con fuerte impacto político
El gobernador de Utah, Spencer Cox, señaló que Robinson era un joven con “ideología izquierdista”, aunque sin afiliación partidaria, y describió el asesinato como un hecho devastador para la comunidad.
El expresidente Donald Trump responsabilizó del crimen a la “izquierda radical” y confirmó que asistirá al funeral de Kirk, programado para el 21 de septiembre.
El proceso judicial recién comienza, con una primera audiencia en el Cuarto Distrito Judicial de Utah, pero ya se perfila como uno de los episodios más conmocionantes de la política reciente en Estados Unidos.
