La diputada de La Libertad Avanza, Lourdes Arrieta, ha revelado una serie de chats que implican a varios de sus compañeros en la organización de visitas a represores detenidos en el Penal de Ezeiza.
En un hilo de Twitter bajo el título “No más impunidad,” Arrieta detalló cómo se crearon varios grupos de WhatsApp para planificar reuniones y almuerzos en los que se discutirían medidas a favor de los militares condenados por crímenes de lesa humanidad.
Según la diputada, la coordinación comenzó con la planificación de un almuerzo con el Padre Javier, en un grupo que también incluía a figuras como Lemoine, Orozco, Mayaraz, Santurio, Benedit, Ferreyra y Araujo.
En el intercambio de mensajes, el sacerdote convocó a una “reunión informal y reservada” para tratar un proyecto militar, que se habría llevado a cabo el 14 de marzo, con la participación de los abogados Laura Olea, Ricardo Saint Jean, y el ex juez de Casación Eduardo Riggi.
Arrieta también divulgó que la abogada Laura Olea compartió documentos en el grupo que proponían cambios en la Ley de Ejecución Penal, el Código Penal, y Procesal para acortar los procesos judiciales.
Además, la diputada hizo pública una conversación en la que un miembro del grupo compartió un archivo titulado “Causas escandalosas,” que supuestamente detallaba casos judiciales con pruebas comprometedoras en todo el país.
En otro de los mensajes revelados, Benedit habría negociado con el director del Servicio Penitenciario Federal, Fernando Martínez, para asegurar el acceso al Penal de Ezeiza.
“Seguiré haciendo públicas todas las pruebas que tengo hasta que el Congreso forme una Comisión Investigadora,” concluyó Arrieta en su declaración.