“Dejemos de mentirle a la gente”: el panelista que hicieron “desaparecer”

Hace pocos días, Catamarca fue el epicentro de un nuevo encuentro de Parlamentarios del Parlasur, que se centró en el Foro de Transición Energética titulado “Oportunidades y Desafíos de la Transición Energética para la Integración Regional”.

Todo muy lindo, una vez más a hablar del verso del potencial, que todos nos vamos a hacer ricos y que la minería trae felicidad para todos los catamarqueños, ósea, lo mismo que vienen diciendo desde hace 30 años, cuando llegó Minera Alumbrera.

Hubo fotos, declaraciones, cafecitos y taza taza, cada uno para su casa. Un éxito la reunión, muy publicitada, con todos felicitándose por el futuro de éxitos que nos espera.

El problema fue que entre los panelistas hubo uno, Federico Pellegrino, que rompió la puesta en escena.

Pellegrino es un licenciado en Ciencia Política. Co-fundador del Laboratorio para la Transición Energética y coordinador de proyectos con impacto socioambiental. Habló poco, pero los dejó a todos en la lona. Sus palabras fueron como una patada en la cabeza de los funcionarios, que lo miraban y no sabían como hacerlo callar.

En un discurso cortito, liquidó el verso, cantó las cuarenta, y les pidió a todos que dejen de mentir.

La solución fue fácil: lo hicieron “desaparecer”, como si nunca hubiera hablado. Vos que estás leyendo esta nota, contame: ¿escuchaste lo que dijo? ¿lo leíste en algún lado? No, no lo vas a ver. No estará en ningún spot. La prensa cómplice, obediente y silenciada lo mandó al freezer con la idea de que nadie jamás lo escuche.

Pero acá si lo vas a poder leer: presta atención y pensá en su mensaje.

“Me gustaría detenerme en la palabra negocio, porque recién decían ‘Che, le terminamos dando más a las mineras, a las petroleras y a las grandes inversiones que lo que ellos pedían’. Eso no es un negocio, eso es una estafa, y eso es un robo. Porque si vamos a usar la palabra negocio, no funciona. Y no son empresarios, el comportamiento de un empresario no es eso; eso es el comportamiento de un pirata que va a un lugar y roba. El RIGI es eso. Es el régimen a la gran colonia. Entonces tengamos la definición esta. El empresario es un tipo que a las 2 de la mañana está viendo si el Gobierno nacional decidió actualizar la legislación y tiene que ajustar sus costos, no los empresarios vivarachos que escriben ellos mismos las leyes. Y esto hay que decirlo, porque nuestros políticos están muy mal, ahora, si no tenemos empresarios que estén a la altura de lo que está pidiendo la Argentina, esto tampoco se va a sacar adelante. Y acá hay algo muy importante, yo coincido en que la minería tiene que ser un motor de desarrollo para la Argentina.

Pero tenemos un gran problema, los mineros. El gran problema de la minería es el propio sector minero. La minería es muy importante como para dejársela solo al sector minero, que tiene una estrategia que es bastante común, y yo no sé qué consultora contratan pero les está robando la guita muchachos, porque lo que hacen son dos cosas. Primero, la solución semántica… ‘minería’ y le agregan un adjetivo, ‘sustentable’, ‘verde’. No, la minería no es sustentable en el tiempo y no lo va a ser nunca, por una sencilla razón, porque saca un mineral que está en el piso y no podés volver a sacarlo porque no se repone.

Segundo, vos no me podés decir que vas a una montaña, ponés cinco toneladas de dinamita, la hacés volar por los aires, la hacés pasar por un lixiviado que es un cóctel de tóxicos, y que eso va a ser sustentable. No es sustentable. Entonces, dejemos de mentirle a la gente.

¿Esto implica no hacer minería? No, implica ir con la verdad.

Me olvidaba la segunda estrategia que es la obra pública. Si una empresa privada está haciendo una obra pública como un colegio o un hospital, es porque te están cagando. Agarrá el bolsillo porque te están robando. Es lo mismo que hacían los narcos en Colombia y que se hace en todo el mundo. Las empresas privadas tienen que hacer negocios y el Estado tiene que hacer obra pública, como en cualquier país normal. Si están haciendo obra pública es porque necesitan la licencia social, licencia social que no tienen porque no le dicen la verdad a la gente.

La gente puede tener la capacidad de decir ‘Che, esta es una minera, puede llegar a contaminar y yo asumo ese riesgo, y la minera me garantiza que me va a pagar si se llega a contaminar’. Y que la comunidad decida democráticamente si quiere o no desarrollar la actividad.

¿Tan mala es su actividad que no le pueden decir la verdad a la gente? ¿Tan malo es su negocio que no le pueden garantizar a la gente que le conviene en su vida cotidiana?

Ahí hay una pregunta entonces, ¿qué hacemos? Yo creo que hay que cambiar los adjetivos por los sustantivos. Hay que dejar de hablarle a la gente con los adjetivos y decirle: ‘Che, van a tener trabajo, vamos a generar esta cantidad de trabajo, vamos a desarrollar esta tecnología gracias a esta actividad’.

 

 


El catucho 

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí