La provincia, y el mundo, están atravesando una crisis sanitaria y social que no tiene precedentes inmediatos. A partir de esta situación las vidas de todos cambiaron drásticamente, al punto que se modificaron muchas cosas de la rutina a la que estábamos acostumbrados.
En Catamarca se dispuso nuevamente el “aislamiento social, preventivo y obligatorio”, y ante esta situación los más afectados por estos cambios, muchas veces, son los más chicos.
En este sentido el equipo de la Dirección de Promoción, Prevención y Abordajes Comunitarios dan recomendaciones y consejos para tener en cuenta con las niñas, niños y adolescentes.
Es importante tener en cuenta que algunas respuestas esperables de los más pequeños pueden ser: estrés, tristeza, miedo, ansiedad, angustia, irritabilidad y enojo; como así también el recuerdo de vivencias traumáticas anteriores, la falta de concentración, alteración de la alimentación y el sueño. Y los más pequeños no están exentos de esta situación.
Ante esto, los expertos recomiendan encontrar formas positivas de expresar sentimientos.
-Es importante que el adulto le haga saber que es natural que se sienta molesto o enojado. Y que pueda responder a las reacciones de manera paciente, escuchando las inquietudes y brindando atención y apoyo.
-Ante el temor, angustia y/o enojo, contener sin negar la gravedad de la situación ni desestimar lo que sienten.
-Otra de las recomendaciones del equipo de Salud es mantener rutinas familiares diarias ya que ayudan a organizar el tiempo.
-Se pueden implementar rutinas sencillas, de ciertos horarios (comida, sueño, tarea, recreación) sin abrumar ni proponerse objetivos imposibles de cumplir.
-Es importante anticipar las rutinas, se puede buscar distintas formas de comunicar de acuerdo a las personalidades y edad; se puede construir una agenda diaria o semanal.
-Tratar de continuar los vínculos con amigos/as, compañeros de colegio, familiares a través de las redes sociales y los medios que tenga disponible. Cabe mencionar que en la actual fase es posible reuniones hasta 10 personas.
-Ofrezca oportunidad para jugar y relajarse siempre que sea posible.
-Otra cuestión importante es la necesidad de movimiento, propio de la niñez se pueden intentar realizar reordenamientos del espacio o armar recorridos distintos en casa utilizando juegos de postas (con pelotas, aros, sillas, mesas, colchonetas, almohadones, telas o cajas de cartón).
-Trate de diferenciar entre los horarios y rutinas de un día de semana de los del fin de semana.
-Seguramente habrá momentos en que no tengan ganas de jugar ni de inventar y eso también es respetable. Es una situación inédita y por ende cada uno/a va haciendo lo que puede.
-Explicar, comunicar, expresar, contar.
Las explicaciones requieren reiteraciones, buscar palabras claras y conocidas por ellos y acompañarlas con gestos, dibujos o canciones. Sumarse a iniciativas que surgen en las redes para compartir en familia con las consignas: “Quédate en casa”, “Todo pasará”, “Todo saldrá bien”, permitiendo a la vez que los/as niños/as emociones del modo en que pueden hacerlo.
¿Cómo informar?
-Recurrir siempre a fuentes oficiales y confiables.
-Es posible que no distingan las imágenes que ven en las pantallas de su propia realidad personal y crean que corren peligro inminente.
-Recuerde que ésta situación es transitoria.
-No esperar que los niños pregunten sobre el tema, consultarles qué es lo que saben. Dibujos, juegos y cuentos pueden ayudar a iniciar la conversación.
-Hacer preguntas abiertas y mostrar disponibilidad para la escucha.
-Sin alarmarlos, ser claros respecto de las medidas de cuidado.