El oficialismo, con las gestiones del titular de la Cámara baja, Sergio Massa, intenta acordar con la oposición, que ya avisó que no está dispuesta a acompañar este proyecto tal como está y hasta amenazó con imponer un dictamen propio en la sesión.
Juntos por el Cambio quiere un proyecto que solamente autorice al Poder Ejecutivo a realizar operaciones de refinanciamiento con el Fondo. Es decir, pretende la reforma o, directamente, la eliminación del artículo dos del proyecto, que especifica las políticas delineadas por el Gobierno nacional para alcanzar las metas fiscales y monetarias que el ministro de Economía, Martín Guzmán, acordó con el organismo internacional de crédito. “El programa es invotable”, sostienen.
Massa intenta destrabar el acuerdo y ayer se reunió con referentes y gobernadores del frente opositor. Pero el titular de Diputados tampoco puede descuidar las gestiones con el oficialismo, donde un sector -el más radicalizado, ligado al kirchnerismo y los movimientos sociales- no está convencido de apoyar el proyecto.
En ese marco, el líder del Frente Renovador intenta alcanzar un punto que deje a conformes a las partes, aunque, ambas, queden algo insatisfechas. Contaría, ahora, con el respaldo de Martín Guzmán, quien, con el correr de las horas, habría abandonado su postura intransigente.
La Casa Rosada aspira a que el acuerdo con el Fondo sea aprobado este jueves o viernes por la Cámara de Diputados. Luego, ya con media sanción, la norma pasará al Senado. Allí, será otra la historia, porque el reglamento es distinto, y porque quien detenta el control de la Cámara alta es Cristina Kirchner, quien mantiene un silencio sepulcral con respecto al convenio.