La Canasta Básica Total (CBT), que determina la “línea de pobreza”, subió un 2,1% en agosto, por debajo de la inflación general del mes.
Durante agosto de 2020, la variación mensual de la canasta básica alimentaria (CBA) con respecto a julio de 2020 fue de 2,6%, según informó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Este porcentaje se encuentra por debajo de la inflación del mismo mes, que fue de 2,7%.
De esta manera, una familia de cuatro integrantes (compuesta por un varón de 35 años, una mujer de 31 años, un hijo de 6 años y una hija de 8 años) necesitó $45.478 para no ser considerada pobre, cuando en julio requería $44.521.
En tanto, la canasta básica total (CBT) para un “adulto equivalente” (varón de entre 30 y 60 años con actividad moderada), creció desde los $14.408 hasta los $14.718.
Por su parte, la Canasta Básica Alimentaria (CBA) que mide la “línea de indigencia” ascendió desde los $5.929 hasta los $6.028, lo cual significó un incremento del 2,6%. Por lo cual, una familia “tipo” necesitó $18.792 para no ser considerada indigente.
Este miércoles el INDEC había dado a conocer la inflación de agosto, que se aceleró al 2,7% respecto al mes anterior.
El rubro alimentos y bebidas, que tiene un mayor peso relativo en los consumos de los hogares más pobres, lideró los aumentos de precios, con un salto promedio del 3,5%, impulsado por los ajustes en los programas de Precios Máximos y Precios Cuidados que se habían implementado a fines de julio.
Verduras, tubérculos, legumbres y frutas explicaron la mayor parte de la variación observada en ese rubro. En el Gran Buenos Aires, los alimentos y bebidas que más subieron fueron la cebolla (32,1%), el agua sin gas (12,2%), el tomate entero en conserva (11,7%), la manzana (9,8%) y el limón (9%).
En los últimos 12 meses, la canasta alimentaria registró una suba del 41,7%, una cifra por encima del aumento de la canasta total, que fue del 37,8%.