El Gobierno analiza reconvertir el subsidio estatal para el pago de salarios en empresas golpeadas por la parálisis económica en préstamos blandos para este mes.
La medida está en análisis por parte del Gabinete económico a partir de dos premisas: la finitud de los recursos que el Estado está en condiciones de distribuir para sostener el empleo en el sector privado, por un lado, y un intento por delimitar los alcances de esa ayuda para las actividades más críticas y reducirla para los rubros alcanzados por la flexibilización de la cuarentena, por otro.
En la Jefatura de Gabinete y en el Ministerio de Desarrollo Productivo le confirmaron que se estudia un menú de opciones para reformular la Asignación de Emergencia para el Trabajo y la Producción (ATP), la herramienta creada a partir de la pandemia que garantiza con subsidios el pago de 50% del salario neto de las empresas en crisis y que cubrió hasta ahora parte de los ingresos de 1,8 millón de trabajadores.
Se prevé que al finalizar el proceso de liquidación de sueldos de mayo el universo de beneficiarios superará los 2 millones de personas, algo menos que los 2,5 millones de alcanzados con los ingresos de abril.
El ATP consiste en un aporte directo de la Anses en las cuentas sueldo de los trabajadores de las empresas que hubiesen declarado una situación de virtual quebranto por la cuarentena, que se efectiviza tras la constatación de las pérdidas desde marzo. Equivale al 50% del ingreso neto con un piso igual al salario mínimo, vital y móvil, en la actualidad de 16.875 pesos, y un tope del doble de ese valor, es decir 33.750 pesos. Fue la segunda medida de auxilio a las empresas luego de los créditos al 24% de tasa pensados para cubrir los salarios de marzo que debían pagarse en abril luego del arranque del confinamiento y con diez días menos de facturaciones.
Para el Gobierno el subsidio cumplió su cometido de colaborar en la economía de las empresas más vulneradas por la cuarentena y al mismo tiempo como salvaguarda del nivel de ingresos de los trabajadores.
Sin embargo, cumplidos los pagos de abril y mayo (calculan los funcionarios que el segundo ATP se terminará de liquidar el viernes) en el Gobierno advierten que para la tercera etapa llegó el momento de reformular el beneficio.