La Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) puso en marcha un protocolo de seguridad el viernes por la mañana en el Aeroparque Jorge Newbery en respuesta a una amenaza de bomba relacionada con vuelos.
Inmediatamente se activó el Centro de Operaciones de Emergencia y se movilizaron al lugar equipos especializados, incluyendo el Grupo Especial de Control de Explosivos y Armas Especiales (GEDEX) y unidades caninas de la PSA. También se contó con la colaboración de personal de Bomberos, el Sistema de Atención Médica de Emergencia (SAME) y la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC).
Los oficiales procedieron a evacuar la zona de preembarque nacional, realizaron una minuciosa revisión de las instalaciones y llevaron a cabo un nuevo control de todos los pasajeros y sus pertenencias. Además, se efectuaron inspecciones exhaustivas de las aeronaves y sus compartimentos de carga. Afortunadamente, todos los procedimientos arrojaron resultados negativos en cuanto a la presencia de explosivos.
Tras la evaluación de la situación, se retomó la operación normal del aeropuerto, permitiendo a los pasajeros comenzar el proceso de embarque en los diversos vuelos programados para ese día.
El incidente generó una investigación preliminar por amenaza de intimidación pública que podría resultar en consecuencias legales. La causa se encuentra bajo la jurisdicción del Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional Federal N° 9, a cargo de la jueza María Eugenia Capuchetti.
