En una declaración conjunta emitida tras la segunda reunión del Grupo Consultivo Nuclear (NCG), Estados Unidos y Corea del Sur lanzaron una advertencia contundente al ejército de Corea del Norte, destacando que cualquier ataque nuclear será respondido con medidas que resultarán en el “fin”. del régimen” de Kim Jong Un.
La creciente preocupación generada por las constantes pruebas de misiles norcoreanos dirigidos a las costas de Estados Unidos, Corea del Sur y Japón motivó la emisión de un comunicado conjunto anticipándose a la posibilidad de un ataque nuclear en 2024.
En el comunicado, se enfatizó que “la parte estadounidense reiteró que cualquier ataque nuclear del RPDC contra la República de Corea será respondido con una respuesta rápida, abrumadora y decisiva”.
Desde la Casa Blanca, se transmitió un mensaje claro de que, en caso de sufrir un ataque nuclear, Estados Unidos responderá de manera equivalente. “Estados Unidos reafirmó su compromiso inquebrantable de proporcionar una disuasión ampliada a la República de Corea respaldada por toda la gama de capacidades estadounidenses, incluida la nuclear”, se indicó.
En esta línea, Kim Tae-hyo, viceconsejero de Seguridad Nacional de Corea del Sur, advirtió que Corea del Norte podría llevar a cabo el lanzamiento de un misil balístico intercontinental en diciembre. Afirmó que “junto con la capacidad de disuadir firmemente las amenazas nucleares y de misiles de Corea del Norte, seremos capaces de adoptar una respuesta inmediata, apabullante y decisiva en caso de un ataque nuclear norcoreano”.