El payasesco exasesor del dictador Domingo Bussi, Javier Milei, ha crecido en las encuestas de manera innegable, no tanto por sus virtudes como por su histriónica figura, y un griterío vacío que puede zamarrear y atraer a algunos desprevenidos.
Milei se postula como el político antipolítica, sortea su sueldo y vocifera contra todos, elevándose como el abanderado de las libertades que viene a destruir la casta.
Todo muy lindo. Pero Milei gasta dinero público igual que todos los demás. Y lo hace, por ejemplo, para que una señora con sueldo del Estado, que le proporciona él mismo con fondos públicos, enseñe a los partidarios de Avanza Libertad a insultar en redes sociales.
No es rumor: todo está filmado y se difundió en redes y medios, con lo que se viralizó rápidamente.
La asesora de Javier Milei denigró a otra mujer, a Ofelia Fernández, durante una “capacitación” para trolls de Avanza Libertad.
Lilia Lemoine, así se llama la que cobra su sueldo con dinero de todos, dijo que estaba “permitido” llamar a la legisladora “tanque australiano de medialunas” en las discusiones en redes sociales.
El video fue filtrado en Twitter y muestra a la asesora de Milei, que es empleada de la Legislatura porteña adoctrinando en agresiones a jóvenes militantes libertarios.
Si esta es la nueva política y la propuesta superadora, Dios nos libre.
Hartos de insultos y peleas, si los argentinos ven como opción a alguien que usa estas armas para la discusión política, vamos de mal en peor.
¿Para cuándo la discusión de ideas, proyectos, propuestas?