El laboratorio Pfizer reconoció que son dos los motivos por los cuales aún no se cerró un acuerdo entre la farmacéutica norteamericana y el gobierno argentino para la provisión de vacunas contra el Covid-19. Esos motivos radican en la ley de vacunas aprobada el año pasado por el Congreso: el primero fue el planteo de excluir la negligencia no sólo del contrato, sino también de la norma aprobada. El segundo problema se relaciona con los criterios para la aceptación de la garantía con contragarantía de ejecución en el exterior.
Además, el gerente de Pfizer Argentina, Nicolás Vaquer, sostuvo durante su exposición ante los legisladores que el laboratorio no tiene “ningún interés en intervenir con bienes del Estado”, negó que el Gobierno haya pedido “pagos indebidos o exigencias de intermediarios” y dijo que se sigue avanzando para alcanzar un acuerdo.
Los problemas legales para avanzar en un trato fueron reconocidos en una respuesta que ofreció Ministerio de Salud, que preside Carla Vizzotti, a un pedido de acceso a la información pública que presentó el bloque de la Coalición Cívica de la Cámara de Diputados. Vizzotti no estará presente en la presentación que harán los laboratorios que cerraron contratos con la Argentina para la provisión de vacunas.