La Justicia ordenó la captura nacional e internacional de Matías Ozorio, de 28 años, señalado como la mano derecha de “Pequeño J”, el narco peruano de 23 años que habría ordenado la tortura y asesinato de Lara Gutiérrez, Brenda del Castillo y Morena Verdi en Florencio Varela.
De acuerdo con la investigación, “Pequeño J” habría dado la orden a los dueños de la vivienda donde fueron hallados los cuerpos para que “organicen todo”, lo que incluyó cavar los pozos en el patio con el fin de enterrar a las tres jóvenes. Además, el crimen fue transmitido en vivo como parte de un macabro mensaje hacia alguien de su propia organización que lo habría traicionado.
El fiscal de La Matanza, Gastón Duplaá, quien dejó el caso en manos de su colega Adrián Arribas, sostuvo que las víctimas no eran el objetivo final, sino el “vehículo de un mensaje” destinado a un integrante de la banda que intentó robarle al líder narco.
En paralelo, este jueves se realizó un allanamiento en el búnker de “Pequeño J”, ubicado en Barracas. Allí la policía encontró trampas electrificadas y un mensaje escrito en una hoja de papel dirigido a las fuerzas de seguridad.
Los cuatro detenidos
Hasta el momento, hay cuatro personas detenidas e imputadas por homicidio agravado. Se trata de dos parejas:
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Daniela Iara Ibarra (19) y Maximiliano Andrés Parra (18), arrestados en la casa donde se hallaron los cuerpos cuando intentaban limpiar la escena del crimen.
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Magalí Celeste González Guerrero (28) y Miguel Ángel Villanueva Silva (27), dueños de la vivienda, capturados en un hotel alojamiento cercano.
Los cuatro permanecen detenidos con prisión preventiva en el penal de Melchor Romero, mientras la investigación se centra en dar con Ozorio y en determinar el rol de cada uno dentro de la organización criminal.
Con información de TN
