Valentín Perrone sigue consolidándose como una de las grandes revelaciones del Moto3. Este domingo, en el Gran Premio de Hungría disputado en el circuito de Balaton Park, el joven de 17 años alcanzó el mejor resultado de su carrera: un segundo puesto que se definió por apenas 18 milésimas frente a Máximo Quiles.
El piloto español se impuso en la última vuelta en una batalla vibrante, dejando al argentino con la sensación de haber estado a un paso de la victoria. El podio lo completó David Muñoz, mientras que Ángel Piqueras y José Antonio Rueda se ubicaron cuarto y quinto, respectivamente. Con este resultado, Piqueras logró acercarse a Rueda, que se mantiene como líder del campeonato.
Perrone, que había clasificado segundo, se mantuvo siempre en el lote de punta. Quiles defendió con firmeza el liderazgo ante la presión del argentino y de Piqueras, quien sufrió un toque de Muñoz en la primera chicana sin consecuencias mayores. Desde allí, el grupo delantero —integrado por Muñoz y Álvaro Carpe junto a los protagonistas principales— marcó diferencias con el resto del pelotón.
La definición fue para el infarto. Perrone llegó a comandar la prueba en varias vueltas, pero en la última, Quiles lo superó en la curva 5. El argentino recuperó terreno en la curva final, aunque entró pasado y permitió que el español aprovechara la inercia. En el contacto entre ambos al inicio de la recta, Quiles consiguió imponerse por un suspiro, quedándose con la victoria.