Más de un millón de turistas viajaron por el país durante el fin de semana largo por el Día del Trabajador

Durante el fin de semana largo por el Día del Trabajador, más de 1.159.000 turistas se movilizaron por todo el país, generando un impacto económico estimado en $256.960 millones, según datos de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Aunque el movimiento fue moderado, el feriado mostró signos positivos para el sector turístico, impulsado por escapadas cortas, promociones y un clima ideal.

La mayoría de los viajeros optó por destinos cercanos, estadías breves y actividades gratuitas o con descuentos. En promedio, cada turista gastó $82.100 diarios y permaneció 2,7 días, totalizando un gasto individual cercano a los $221.670. A pesar de la prudencia en el consumo, las escapadas rurales, el turismo de experiencias y las propuestas culturales ayudaron a sostener la actividad.

Comparado con el mismo feriado de 2023 —que tuvo sólo tres días— el movimiento turístico creció un 26%, mientras que el gasto total aumentó 42,6% en términos reales. En relación a 2018, cuando el feriado también fue de cuatro días, se registró un incremento del 15,9% en el número de turistas y del 24,4% en el gasto.

Aerolíneas Argentinas transportó 160.000 pasajeros dentro del país, con un 85% de ocupación en vuelos de cabotaje, destacándose destinos como Mendoza, Córdoba y Bariloche. Además, más de 20.000 personas cruzaron a Chile por Mendoza, atraídas por los precios en ropa y tecnología.

La agenda de actividades en todo el país incluyó ferias, maratones, fiestas populares y eventos gastronómicos. Mendoza, Misiones, Córdoba y Buenos Aires mantuvieron niveles altos de ocupación, mientras que provincias como Formosa, Chubut y La Pampa ofrecieron alternativas conectadas con la naturaleza.

Catamarca vivió un fin de semana largo con amplia oferta cultural y turística. En Valle Viejo se realizaron jornadas literarias, trekking, torneos deportivos y espectáculos. En la capital, el ciclo “Mayo Musical” atrajo a locales y visitantes con ferias artesanales, peñas, clases de danza y talleres musicales. La experiencia “Hostería a las Llamas” ofreció una fusión de gastronomía regional y música en vivo, mientras que la Casa de la Puna y el Pueblo Perdido de la Quebrada fueron puntos clave para las visitas guiadas y actividades artísticas.