María de los Ángeles Barros, exempleada de la fábrica Mom Sports, junto a otros compañeros afectados volvieron a alzar la voz para reclamar por la reincorporación laboral de ella y sus compañeros, en medio de una situación que califica como “muy crítica”.
“Estamos esperando que el gobernador de una vez por todas nos reciba”, expresó Barros, quien junto a otros trabajadores sigue aguardando una respuesta oficial frente a la falta de trabajo y los sueldos adeudados.
Según relató, el estado actual de la planta acentúa la incertidumbre: “La empresa en la que estábamos trabajando la sacaron al patio, bajo un techo, las máquinas están ahí, esa era un aval para nosotros para cobrar a través de eso”. Las maquinarias, que representan una posibilidad de garantía para los pagos pendientes, fueron desplazadas del lugar habitual de trabajo, sin una definición clara sobre su destino.
Barros también señaló que no solo Mom Sports les adeuda salarios, sino también Textilcom. “Nos deben de Textilcom y de Mom Sports”, remarcó, haciendo hincapié en el largo camino que llevan recorriendo sin soluciones concretas.