En Israel, la imagen de Omar Shem Tov, un joven israelí de 22 años, besando en la frente a dos terroristas de Hamas en el momento de su liberación causó indignación. Durante la entrega de los rehenes en la Franja de Gaza, el joven, sonriente y efusivo, parecía participar de manera voluntaria en el acto. Sin embargo, un ángulo diferente de la misma escena, que comenzó a circular en redes sociales, reveló que las circunstancias eran muy distintas.
La secuencia completa mostró que un camarógrafo de Hamas se acercó a Omar y le susurró algo al oído antes de la interacción con los terroristas, quienes luego asintieron con la cabeza. En ese momento, el joven se vio forzado a besar a los dos hombres encapuchados y armados, según confirmaron su padre y otros testigos.
עומר שם טוב מקבל הוראות מהצלם לתת נשיקה לשני מחבלי חמאס, לכל מי שחשב שזה מרצון אז תדעו ששום דבר מהמופע החולני הזה הוא לא מרצון pic.twitter.com/6JBXBiBbjg
— Eliran (@tkhrii) February 22, 2025
El padre de Omar, Malki Shem Tov, relató en una entrevista con el medio israelí Hadashot Kan que los terroristas obligaron a su hijo a dar los besos, una situación que generó confusión en un principio debido a la imagen editada que fue difundida inicialmente.
Omar, quien fue uno de los rehenes más afectados por su cautiverio debido a su condición de salud, sufrió importantes pérdidas físicas. Padece de asma y enfermedad celíaca, lo que complicó aún más su situación en prisión. Su padre indicó que durante sus primeros 50 días de cautiverio estuvo recluido con otro rehén, pero después estuvo solo, lo que empeoró su estado de salud, perdiendo 17 kilos.
Tras ser liberado, Omar fue trasladado al Centro Médico Rabin en Petah Tikva, donde su familia se ha asegurado de ofrecerle alimentos sin gluten, adaptados a su dieta estricta. En el helicóptero que lo llevó al hospital, Omar escribió en una pizarra: “Quiero una hamburguesa”, una solicitud que su padre interpretó como un signo de su recuperación.