El último candidato a gobernador que presentó la oposición catamarqueña se bajó solito de las internas de la Unión Cívica Radical, en medio de un fuego cruzado de denuncias y contradenuncias.
Gómez, en la campaña electoral de 2019, fue denunciado por una empleada del ICI, el instituto médico de su propiedad, por un supuesto abuso sexual.
La causa nunca avanzó gran cosa, el médico no fue imputado ni se conocieron más novedades de la denunciante. Incluso los radicales decían, en su momento, que todo se quería explotar para perjudicar la campaña del hombre elegido para devolver al poder a la UCR, unida a Mauricio Macri en Juntos por el Cambio.
Gómez perdió la elección y todo quedó en el olvido. Pero ahora que se postulaba en la interna de la UCR, sus propios amigos correligionarios le sacaron en cara aquella denuncia.
El cardiólogo había respondido en su momento que lo querían extorsionar con mentiras, y en el propio partido un importante grupo de mujeres salió a defenderlo y respaldarlo.
Pero la novela terminó rápido, porque Gómez se autoexcluyó de la compulsa partidaria, dejó su candidatura para el Comité Capital vacante y tendrá la esperanza de que no se hable más del tema.
¿Por qué se bajó si es inocente y estaba respaldado? No se sabe. La maniobra huele a final de su carrera política. Porque aunque la Justicia avance y termine por dictaminar que nunca abusó de nadie, la reacción de sus copartidarios bien pudo sacarle a Gómez cualquier entusiasmo por trabajar junto a ellos.
Un golpe bajo propio del mundillo político, porque los mismos que lo acompañaron en 2019 salieron a señalarlo ahora.
La denuncia que veían inconsistente hace año y medio, ahora les parece descalificadora. ¿Es el efecto Enrique Aybar? ¿O una jugada más de los celestes por asegurarse el dominio del partido cueste lo que cueste?
Por último, ¿para qué quieren seguir manejando un partido que vienen chocando una y otra vez? Dicen que se sabrá la respuesta si Oscar consigue postularse por otro mandato y un par de años más con fueros y buena dieta en el Congreso
El peronismo brinda y celebra, presumiendo una larga estadía en el poder, que ya lleva una década y, parafraseando al Frente Cívico y Social (QEPD)… pueden decir “vamos por más”.
